El pasado fin de semana vivimos una de las experiencias de participación ciudadana más importantes en la historia de Chile. Si bien había mucho escepticismo sobre la Consulta Municipal organizada por la Asociación Chilena de Municipalidades y escuchamos comentarios como «no vale nada porque no será vinculante” o “no van a ir a votar, ni siquiera votan para las presidenciales”, más de 2,1 millones de chilenos y chilenas participaron plasmando sus opiniones en un voto.
Más allá de los resultados, lo importante es el hito en sí mismo: una clara demostración de participación ciudadana, quizás una de las más importantes de nuestra historia.
Para entender este fenómeno, vale la pena mirar un poco hacia atrás y analizar las tendencias de voluntariado en nuestro país. De acuerdo a nuestra encuesta, el 2006 solo un 7% de la población decía haber sido voluntario el último año, mientras que hoy esa cifra se sitúa en el 32% de los chilenos y chilenas. Casi cinco veces más que hace trece años.
¿Cómo se explica esta alza? Algunos dirán que tiene que ver con múltiples posibilidades de conocer e informarse de causas y organizaciones. Aunque eso es cierto, creo que el aumento del trabajo voluntario es reflejo del empoderamiento y entendimiento del espacio político como un catalizador de cambios sociales, el cual no necesariamente debe estar vinculado a la “política partidista”.
El voluntariado es una forma efectiva de participación ciudadana, en la que no sólo me manifiesto en la calle o en el voto, sino que defiendo ideales de forma activa, uniéndome con aquellas personas que comparten mi visión de vida, creando una mejor sociedad para todos en su entorno.
¿Habría sido posible la Consulta Ciudadana sin el apoyo de miles de voluntarios? El fin de semana no habían militares resguardando los centros de votación, ni presupuesto del aparato central. Esta vez fue distinto: voluntarios se comprometieron con la democracia y se ofrecieron a ser vocales de mesa, ayudar a personas de la tercera edad con el voto electrónico, ordenar los lugares de votación y así una larga lista de actividades.
Gracias a todas aquellas personas que, de forma silenciosa y alejada de las cámaras, nos permitieron vivir uno de los hitos de participación ciudadana más importantes en la historia de Chile. Justo en el mes en que se conmemora en todo el mundo el Día Internacional del Voluntariado.